Buscar en Arteshoy | |
Obras maestras del Museo de CapodimontePalacio Real de Madrid. Del 29 de septiembre al 10 de diciembre de 2006
Por Julia Sáez-Angulo Entre las piezas más singulares se encuentran "Santa Eufemia de Mantenga"; "La Magdalena" de Tiziano; "El Soplón" de El Greco; "El Cristo Crucificado" de Van Dyck y "San Sebastián" de José Ribera. Es una buena ocasión para contemplar estas obras de autores clásicos fuera de un circuito cercano. El Museo de Capodimonte comenzó su andadura, en el siglo XVI, con la colección de arte de los Farnesio y fue ampliada por Carlos III, que habría de ser rey de España, que lo trasladó al edificio actual situado en lo alto de la colina de Capodimonte. En 1995, después de una nueva reubicación de las colecciones se abrió con una muestra sobre los Farnese. "El rey Borbón va a hacer construir en Nápoles un Museo, donde se reunirán y estarán expuestas cuantas obras de arte posee: el museo herculanense, los frescos de Pompeya, los cuadros de Capodimonte, toda la herencia de Farnesio. Será una bella y grande empresa", escribió Goethe en su libro "Viaje por Italia". El recorrido de la exposición en Palacio Real va llevando al espectador por la ciudad y la Corte, donde figuran soberbios retratos de María Amalia de Sajonia y Carlos de Borbón, que subió al trono en 1734. La sala II ofrece pintura italiana del Quattrocento y Cinquecento, con las citadas obras de Tiziano y el Greco. El Clasicismo de la escuela boloñesa ofrece un bello cuadro, "Reinaldo y Armida" de Carraci. Se pasa a la escuela italiana de los siglos XVII y XVIII, junto a la pintura flamenca con sus naturalezas muertas, con piezas de Bruegel. La sala V se dedica a los pintores extranjeros en Italia, con obras de Van Dyck o Vouet. A continuación, la época dorada de la pintura napolitana, con el primer Naturalismo para terminar con el Rococó de Luca Giordano o Solimena. Es un recorrido rico e ilustrador, con buenas obras de grandes autores, sin necesidad de enfatizar con la denominación de "obras maestras". Un conjunto que nadie debiera perderse. Hay un aforismo en arte que dice: "las grandes obras
no deben viajar". Estas 54 piezas, calificada de "obras maestras"
del Museo Capodimonte han viajado a tres sedes, lo que no deja de ser
muy generoso por parte de la entidad prestataria, pero algo peligroso
quizás para las piezas. Nicola Spinosa, superintendente de los
Museos de Nápoles y comisarios de la muestra alega que se han tomado
todas las precauciones de transporte y que se ha evitado el envío
de pinturas sobre tabla siempre más problemáticas en su
conservación. Así sea.
|
Nº
14 - Octubre de 2006 |
© ArtesHoy.com - Todos los derechos reservados |