Buscar en Arteshoy | |
"100% África". Ventana al mundo del continente negroMuseo Guggenheim. Bilbao, del 12 de octubre de 2006 al 18 de febrero de 2007
Por Alberto López Echevarrieta Es una forma de arte que se nos puede antojar primitivo y simple, pero tiene el valor y la frescura que emana de unos artistas que viven en un continente en el que hablar de museos de arte contemporáneo es ciencia-ficción. Sin embargo, según André Magnin, comisario de la exposición "100% África", el arte africano es muy anterior al europeo. Justifica el desconocimiento que tenemos de él por la forma desconectada de trabajo que han tenido estos artistas. Ahora, sin embargo, gracias a la telefonía móvil e Internet, los intercambios entre ellos han permitido que se pueda acelerar la visión de sus obras. De esta manera,y debido a las nuevas tecnologías, los autores saharianos se mantienen unidos y juntos pueden organizarse para exponer sus obras en el resto del mundo. Viajan y se conocen entre sí. La exposición que se puede ver en Bilbao es muy voluminosa. Hay pintura, fotografía y escultura que hasta ahora nunca se había mostrado. En su mayor parte son obras inéditas. Hay una característica común: todos los artistas aquí representados viven en el África negra, aunque no se han excluido a los africanos de la diáspora porque sus raíces son las mismas. "El arte africano –ha dicho André Magnin en la presentación- empezó mucho antes que el occidental. Sus artistas no salen de la nada. Es importante señalar que, durante mucho tiempo, este arte tenía una función colectiva dentro de la comunidad y esto se transmite en esta exposición. Todos los artistas aquí representados hacen todavía su trabajo en régimen de comunidad, por y para la comunidad, pero a la vez tienen una visibilidad a nivel mundial porque expresan las mismas problemáticas que hay en otras partes del mundo. Ellos lo hacen desde su propia herencia, con su propio bagaje. Por eso hay que destacar la preocupación que tienen por la colectividad". La colección de Jean Pigozzi es única en el mundo. Llevarla a cabo ha supuesto no sólo conocer bien África, sino haberla recorrido en su totalidad, porque estas obras no se pueden ver en galería alguna de Berlín, Londres o Nueva York. Los propios artistas reinventan las fronteras del arte y muestran lo que están perpetuando. Hacen representaciones del mundo en las que unos no pueden eliminar a otros. Los autores de estas obras no están aquí por el color de su piel o por su pertenencia a un continente. Ante todo son artistas y con todo merecimiento pueden aspirar a que sus trabajos sean expuestos internacionalmente. Para llevarlos a cabo han tenido en cuenta aspectos comunes a todos y que a nosotros nos pueden llamar la atención. Por ejemplo, la relación de la luz con Dios. Hay en sus obras una voluntad cargada de esperanza. Inventan y reinventan un mundo y eso queda reflejado en esta muestra. Para el comisario de la exposición, África
es un continente que ha sido colonizado y saqueado en un intento de borrar
su cultura. Afortunadamente, la operación no fue totalmente efectiva.
Para André Magnin estamos ante un proyecto estético,
pero también político.
|
Nº
14 - Octubre de 2006 |
© ArtesHoy.com - Todos los derechos reservados |