Paulina Parra. I am, I am not

Por Julia Sáez-Angulo

Nacida en Venezuela, (Caracas, 1969), Paulina Parra estudió Cine en la T.A.I. de Madrid, Publicidad en UCLA (California) y Diseño de Moda en el Instituto Europeo de Diseño de Madrid. Interesada siempre por la imagen y el sentido plástico, su vocación se redefinió y concentró en la pintura, por lo que hizo varios talleres de arte en el Círculo de Bellas Artes con Medina Valcarcel o con Daniel Canogar.

Desde entonces su entrega a la pintura es intensiva y absorbente. Ha expuesto en diversas convocatorias: "Formas Vivas", Energías Positivas", "Tendencias 2004" y "Arte Fluido" en La Nave del Arte de Madrid, donde sus cuadros captaron la atención por su espontaneidad, frescura y capacidad de sugerencia.

En su última muestra en el Espacio F., Paulina Parra expone sus cuadros de grande y mediano formato, con su particular mundo de palabras, más que grafiti . Palabras, palabras y más palabras, ( Wards, wards, wards diría Shakespeare) con su propia grafía sobre tablas o lienzos estucados, técnica que ella conoce a fondo. Trabaja con pigmentos naturales, óleo o acrílico. Le interesan las palabras porque sabe que transmiten directamente el concepto que entrañan, pero las quiere ver en un recipiente plástico, oscuras o negras, entre el fondo blanco, crudo o su color rojo explosivo que no habla de sangre ni de drama sino de luz radiante.

"Me expreso con palabras inglesas porque yo estudié el bachillerato en Inglaterra (uno no es de donde nace sino de donde se ha hecho el bachillerato, dice el dicho) durante doce años y el inglés es un idioma con el que me comunico con mi hermana que estuvo en la misma situación, no así con mis padres. Me gusta el inglés porque es un idioma preciso y directo, aunque también incluyo palabras en castellano, declara Paulina Parra.

Blanco, Rojo y Negro le entusiasman como colores absolutos "con los que me siento a gusto y puedo decir todo lo que quiero". La pintora no requiere los colores primarios, no los necesita. Su pintura, no tiene nada que decir con ellos. Las palabras escritas se funden con los fondos, con los gestos circulares o en bandas, en un todo fundido, de manera que se hacen igualmente pintura. La espiral o los ritmos circulares en rojo las envuelven. Los textos borrados o semienterrados sugieren más que se imponen. Hay un automatismo controlado en la pintura de esta venezolana, residente en Madrid.

El video es otro medio de expresión que le interesa y que completa su obra. Una artista que sabe desenvolverse con soltura en las artes visuales.

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