PORCELANA BARROCA DE LUJO

Por Alberto López Echevarrieta

Los Liechstenstein

La exposición se compone de 323 obras procedentes de distintas colecciones privadas y de los museos europeos y norteamericanos más importantes, si bien una gran mayoría pertenecen a la familia propietaria del imponente edificio. Los Liechstenstein son una institución en el viejo continente. Disponen de un principado situado entre Suiza y Austria de 160 kilómetros cuadrados cuya capital es Vaduz. Su fortuna, almacenada desde tiempo de los Augsburgo , es incalculable. En Viena tenían varios palacios, uno de los cuales lo convirtieron en museo para acoger en él la importantísima colección de obras de arte que fueron adquiriendo a lo largo de cuatro siglos. La llegada del nacionalsocialismo truncó el normal desarrollo de sus actividades hasta el punto de que, por seguridad, se llevaron a Vaduz todo su tesoro artístico.

Reestablecida la democracia y finalizado el período de ocupación, este palacio fue alquilado al Estado para acoger en él Arte Moderno hasta que quedó pequeño. El 29 de marzo de 2004 volvió a abrir sus puertas ya como Museo Liechtenstein para mostrar la colección privada de sus dueños, considerada como la más importante del mundo y con una nómina compuesta por buen número de obras de Rubens y Van Dyck por sólo citar a dos maestros indiscutibles.

Un detalle: Mientras el resto de los museos de Viena tiene que luchar por conseguir subvenciones estatales para mantenimiento y adquisiciones, esta pinacoteca se rige únicamente por el buen gusto de sus dueños que se permiten comprar obra sin problemas de ajustes presupuestarios.

La escuela vienesa

Este prólogo puede situar al lector ante la importancia que en el desarrollo de las artes ha tenido la familia Liechtenstein a lo largo de cuatro siglos. Ahora, en la planta baja del palacio dedicada a las exposiciones temporales, se muestra el trabajo realizado por la primera manufactura de porcelana que tuvo Claudius Innocentius du Paquier en Viena y las piezas comparativas elaboradas bajo su influencia procedentes del taller de Carlo Ginori en Doccia, cerca de Florencia. La exposición se completa con esculturas y los fabulosos bronces del renacimiento y barroco elaborados por artistas que van desde Giambologna hasta Tacca .

Du Paquier , fallecido en 1751, solía decir que él era "el primer inventor de la manufactura de porcelana en Austria" . Su fábrica trabajó de 1718 a 1744 y dejó para la posteridad obras maestras aparte de crear escuela. El 27 de mayo de 1718 el emperador Carlos VI le nombró proveedor de la corte lo que le permitió facturar durante veinticinco años. Aunque el secreto de la porcelana ya lo había descubierto Walter von Tschirnhausen en Meissen, fue Du Paquier quien dio categoría a un trabajo que contó con el respaldo de la corte imperial.

La exposición ocupa tres amplias salas y una impresionante biblioteca. Se compone de 323 piezas algunas de las cuales son platos, jarras, jarrones, tazas, soperas, juegos de café... Pero son las figuras lo que más tienta a la vista. Un gran medallón de porcelana sobre fondo de madera noble cuelga de una de las paredes. Tiene dos efigies, un hombre y una mujer, alrededor de las cuales puede leerse "Franciscus Loth. Maria Theresia Austriaca R. I. S. A. virtute amore et imperio pares" .

La escuela florentina

El barroco se desarrolló en Florencia gracias al mecenazgo de los Medicis , familia que, durante siglos, fue promotora de las artes. Supieron crear una inquietud cultural que atrajo a pintores, escultores y arquitectos de Inglaterra y Francia. La fábrica de porcelana de Carlo Ginori nació en 1737. Al morir Gian Gastone de Medicis , último miembro de la famosa dinastía, Franz Stephan de Lorraine , esposo de la que luego sería emperatriz María Theresia , fue nombrado Gran Duque de Toscana y regente de Florencia. Durante este período, los artistas florentinos, ya con una fama merecidamente ganada, salieron a recorrer mundo y a crear escuelas.

Carlo Ginori trabajó la porcelana durante veinte años en Doccia, en las proximidades de Florencia. Marchó a Viena, quedando su hijo Lorenzo al frente de la artesanía. Uno de sus trabajos más reconocidos es un crucifijo realizado entre 1745 y 1750 en porcelana blanca. La figura de Cristo aparece con las manos y pies clavados siguiendo el modelo en bronce de Alessandro Algardi .

La temática religiosa casi está tan presente como los motivos orientales, muy propios en jarras, tazas y platos. Una Piedad realizada en la factoría Ginori llama la atención por la perfección del grupo que lo forma: Un Cristo yacente, la Virgen y cuatro ángeles. El conjunto, en porcelana policromada, descansa sobre peana de ébano y data de 1745/46 siguiendo un modelo de Massimilano Soldani Benzi .

Otras escuelas

Aunque Du Paquier y Ginori son las dos grandes estrellas, la exposición se completa con trabajos realizados en Japón, Meissen, Nuremberg y Holanda proporcionando al conjunto un aspecto internacional de gran importancia por el extraordinario material que presenta y que permite establecer todo tipo de comparaciones.

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