Gotarrendura (Ávila), excavaciones arqueológicas en el Palacio de Santa Teresa de Jesús
por Julia Sáez-Angulo
El conocido por los lugareños de Gotarrendura (Ávila) como palacio de Santa Teresa, hoy más conocido por los visitantes como El Palomar, está siendo objeto de excavaciones arqueológicas que han dado lugar al encuentro de las jarcias y los suelos encodonados de algunas estancias. Todo ello es motivo celebrado por los habitantes de Gotarrendura y por las Cruzadas de María, dueñas hoy del Palomar.
Las excavaciones fueron mostradas por el ex alcalde de Gotarrendura Fernando Martín, ante la alcaldesa actual Yolanda de Juan, los concejales de su corporación y los de las localidades de Berlanas y Mungorría, que acudieron a escuchar el pregón de las fiestas de las Nieves, que tienen lugar el 5 de agosto.El recinto del palacio de santa teresa de Jesús (Gotarrendura. Ávila – 1515 – Alba de Tormes, 1562), de la que este año se celebra el V Centenario de su nacimiento, se completa con un gran jardín, que alberga el hermoso Palomar de 700 nidales, un pozo y una noria, así como diversos árboles, algunos de los cuales, de plantación reciente, serán sustituidos por moreras, citadas por santa Teresa en sus libros.
Recordemos que la santa reformadora del Carmelo tomaba la huerta y el jardín, que tan bien conocía, como ejemplos para sus libros sobre camino de perfección en la oración. Cuatro modos de obtener el agua, a igual que la unión con Dios en el rezo: el pozo con una polea y mucho esfuerzo; la noria que facilita la subida del agua; el río cercano, con agua abundante, y finalmente la lluvia mansa que baja del cielo generosamente.
Santa Teresa de Jesús nació en Gotarrendura, al igual que todos sus hermanos, porque allí su madre pasaba largas temporadas, ya que en la casa-palacio podía obtener abundante condumio de hortalizas y palominos. De hecho, Santa Teresa también recurrió al administrador de su familia para que le enviara algunos palominos a su convento y sus monjas pudieran comer algo de carne.
Ávila capital y los carmelitas disputan a Gotarrendura el ser la cuna de la Santa, hasta el punto de que la han marginado en las actividades del V Centenario y de la ruta Santa Teresa, De la cuna al sepulcro, que llega hasta Alba de Tormes donde murió la Reformadora santa. Ridículamente no le han concedido ni siquiera el hecho evidente de que Gotarrendura fue lugar seguro de infancia de Teresa de Jesús.
Esta desconsideración de olvido voluntario ha llevado a la corporación de Gotarrendura a organizar y celebrar relevantes actos culturales referidos a la Santa, en cada uno de los doce meses que durará el centenario: desde los esponsales de los padres de santa Teresa que tuvieron lugar en la parroquia de San Miguel, hasta la colocación de murales cerámicos con las imágenes de las diecisiete fundaciones de la Santa, en los muros de la casa-palacio El Palomar, pintadas por Eugenio López Berrón .
En Ávila parece que fue bautizada en la iglesia de san Juan a los pocos días de nacer. La partida de bautismo de santa Teresa no aparece en Berlanas, la iglesia de la comarca abulense de la Moraña, la llamada iglesia de los pueblos –entre ellos Gotarrendura-, donde se bautizaban todos los habitantes de la comarca, que tenía la advocación de Nuestra Señora de Ganduñe (hoy Asunción, que es la traducción del vasco original de los repobladores). Los obligatorios libros de registro de bautismo, comenzaron a imponerse en la localidad años más tarde
¿Cuáles son las tesis que abonan la tesis de que santa Teresa nació en Gotarrendura? : por analogía, el hecho de que todos sus hermanos hubieran nacido allí; segundo, la tradición del pueblo en la creencia de que así fue, junto a un recuerdo perpetuo de su casa-palacio; tercero: los libros de Bachillerato hasta los años 80, hablaban del nacimiento de la Santa en Gotarrendura, recogiendo una larga tradición en este convencimiento; y, por último, autoridades de la talla del hispanista francés y premio Príncipe de Asturias, Josep Pérez, lo afirma también en su reciente biografía Teresa de Ávila y la España de su tiempo, así como la del desaparecido carmelita padre Efrén de la Madre de Dios, gran experto teresiano, que fue reconvenido por los Carmelitas, auténticos interesados en decir que Teresa de Jesús nació en la ciudad de Ávila, hasta el punto de haber recreado una instalación sobre la habitación de su nacimiento en la ciudad amurallada como si fuera genuina.