Mujer y deporte
por Alberto López Echevarrieta
Museo Vasco de Bilbao, del 6 de marzo al 15 de junio
Treinta y tres fotografías, ropa, programas y útiles apropiados componen la exposición “Mujer y deporte” que ha inaugurado el Euskal Museoa/Museo Vasco de Bilbao coincidiendo con el Día de la Mujer Trabajadora y que se completará dentro de unos días con otra titulada “Mujer y Trabajo”. La muestra gráfica, dominada por el blanco y negro, comprende las actividades deportivas llevadas a cabo por las féminas en un tiempo anterior a 1975. “La lejanía del tiempo son suficientes para poder valorar con reposo el deporte que se consintió a la mujer”, ha señalado el periodista deportivo Ernesto Díaz en la presentación.
Labores propias de su género
Ciertamente hubo un tiempo en que la mujer estuvo relegada a un segundo plano social, con escasas posibilidades de destacar en los diversos campos sociales, culturales y económicos merced al estigma bien marcado en el apartado “Profesión” de su DNI: “Las labores propias de su género”. En contadas ocasiones surgían casos excepcionales que permitían hacer suponer a los incrédulos que la inteligencia no tiene un sexo concreto.
Lo curioso del caso es que, cuando surgía alguna mujer que destacaba en algo, se le miraba con admiración, como si fuera una excepción. Hoy, afortunadamente, la sociedad ha avanzado mucho en este sentido. Tal vez haya un sector joven para el que las fotografías que componen esta exposición supongan una mirada poco menos que prehistórica, cuando lo cierto es que la plena incorporación de la mujer al deporte –es el caso- es bien reciente.
“Nos han tenido escondidas en diferentes ámbitos”, ha denunciado Ibone Bengoetxea, concejala de Cultura del Ayuntamiento de Bilbao, en la inauguración de la muestra. “El material que exponemos constituye una mirada al pasado y refleja lo que la mujer podía hacer en una época aún no muy lejana”, matiza Sorkunde Aiarza, coordinadora de actividades del Museo Vasco, en el mismo acto.
El inicio del deporte femenino
Las fotos y sobre todo la vestimenta utilizada en distintos deportes hablan bien a las claras de que hubo algunos deportes que sólo los pudieron practicar señoritas, pertenecientes a familias de élite –caso de la equitación, el jockey y el esquí, por ejemplo-, mientras que el resto se tenía que contentar con las tablas de gimnasia del colegio –las que tenían acceso al mismo- y algunos campeonatos escolares de baloncesto y natación principalmente. La selección de fotografías es muy acertada, ya que ofrece imágenes de acontecimientos que, sin pasar a la historia del deporte, fueron en su momento motivo de comentarios y, sobre todo, supusieron alicientes para crear un poso que, con el paso del tiempo, ha dado notables figuras internacionales. Así podemos ver a las baloncestitas vascas en el Campeonato de España de Escolares que se celebró en Málaga en 1972. O la final para lograr el máximo título de Liga Femenina de jockey sobre hierba que se celebró en marzo de 1971 en Vigo en el que el Real Club Jolaseta perdió por 1-0 ante el Atlético de Madrid.
Hay también imágenes de quienes fueron ídolos de una época, como Carmen Ybarra, la destacada jugadora de jockey o las hermanas Belausteguigoitia que hacían ballet acuático ya en 1949. Una de ellas, Bibine, aparece en Chapultepec (México) participando en los Campeonatos Nacionales Mexicanos de 1950.
Curiosidades
Estas fotografías en glorioso blanco y negro nos permiten contemplar instantáneas de los Juegos Centroamericanos que se celebraron en 1950 en la ciudad de Guatemala, donde Ibone Belausteguigoitia alcanzó la Medalla de Oro en salto de trampolín de 3 metros.
Hay también un recordatorio para una curiosa experiencia que tuvo lugar en Bilbao del 6 al 8 de diciembre de 1975, cuando tuvo lugar una competición de baloncesto durante 51 horas continuadas superando el frío, las noches y el sueño.
En el capítulo de utilería podemos ver las raquetas de tenis con sus marcos prensa utilizados en 1958, así como vestidos de la época. Todo este material se ofrece en un marco amplio y cómodo que nos permite trasladarnos a una época pasada en la que la mujer empezó a plantar sus pinitos en deportes en los que actualmente triunfa internacionalmente. “… Pero todo tiene un principio y esto es lo que ofrecemos en esta exposición”, señala Sorkunde Aiarza.