«Nieve en la Azotea»
por Redacción
Impulsar el arte de los estudiantes
Acuerdo entre Ardavín Galería y el Centro Felipe II de Aranjuez para impulsar el arte de los estudiantes de este centro madrileño, adscrito a la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid, mediante la exposición «Nieve en la Azotea», con las creaciones de seis de los mejores alumnos del último curso del Grado en Bellas Artes. La muestra se celebrará del 16 al 31 de mayo y con ella el espacio cultural madrileño prosigue en su intención de ser un referente en cuanto al apoyo y el lanzamiento de jóvenes creadores.
Currículum de los autores de Nieve en la Azotea
Ana Sanz Rivas (Madrid, 1991). Su profundo estudio del paisaje de altura da como resultado imágenes de gran luminosidad atmosférica y sensación de espacio. Una revisión actual de la tradición del paisaje nórdico del XIX.
Rocío Ocaña Núñez (Madrid, 1991). Esta joven pintora ahonda en la representación del espacio en torno a perspectivas infinitas y puntos de fuga indefinidos. En los cuadros de Rocío Núñez intentamos abordar el horizonte como si fuéramos capaces de hacerlo hasta perdernos en la profundidad de su atmósfera.
Victor Gutierrez Pancorbo (Madrid, 1991). Este pintor aborda la inmensidad del paisaje cotidiano a través espacios abiertos que busca en la ciudad o en su entorno más cotidiano. A través de pinceladas de una potente carga gestual, otorga a sus imágenes de una original sensación encontrada entre lo pesado y lo liviano, a la manera de un Lucian Freud o un Anselm Kieffer.
Aurora Morillo-Velarde Madrazo (Madrid, 1990). Un sorprendente punto de vista aéreo y una no menos innovadora técnica pictórica convierten a la imagen de esta pintora en una abstracción pura, que sin embargo se convierte en una potente figuración a través de pequeños “símbolos humanos” que devuelven al espectador al referente figurativo de la realidad, a la manera de un Juan Genovés o un Gherard Richter.
Davíd Gómez Gómez (Madrid, 1990). Este pintor de vocación realista analiza el espacio aéreo del paisaje a través de una particular traducción en forma de pinceladas certeras que van construyendo la realidad a base de pequeños toques de color, generando una imagen híbrida entre lo visto y lo vivido, entre la realidad y el recuerdo.
Laura Lucena Cortés (Madrid, 1990). Esta joven pintora nos presenta un novedoso concepto de paisaje basado en recorridos del cuerpo humano a través de puntos de vista insólitos o incluso a veces imposibles. Sus cuadros representan fragmentos de la geografía del cuerpo humano que son leídos por el espectador como si caminara entre las dunas de un desierto o se deslizara entre los valles de una montaña.