Fernando Ángel Moreno (ed.): «Prospectivas. Antología del cuento de ciencia ficción española actual»
por Alberto García-Teresa
Salto de página, 2012. 432 páginas
Mediante una excelente selección, este volumen nos acerca a lo más destacado de la narrativa breve de la ciencia ficción española contemporánea; un género que ha ido ofreciendo un buen manojo de textos sobresalientes en nuestra tradición literaria.
Fernando Ángel Moreno (autor también del fundamental Teoría de la literatura de ciencia ficción. Poética y retórica de lo prospectivo) abre el volumen con un interesante prólogo donde desglosa las claves de la ciencia ficción española, además de reveladoras especificaciones teóricas. Para él, los rasgos propios del género en España son: «la ausencia de personajes femeninos y la escasa profundización en ellos (…), la ausencia de robots y extraterrestres, el humor, la insistencia en lo subversivo, el desinterés por la construcción utópica, la preocupación por la tradición literaria clásica española, la metarreferencialidad, y la obsesión por lo divinizado desde un sentido cercano a lo religioso».
Prospectivas agrupa textos ya considerados unánimemente como clásicos (como el magistral “El rebaño”, de César Mallorquí, o “La estrella”, de Elia Barceló), que se hayan incluidos en monografías y recopilaciones descatalogadas en la actualidad, junto a aportaciones de narradores del siglo XXI. De hecho, asume el riesgo de presentar dos textos inéditos, de Eduardo Vaquerizo y de José Ramón Vázquez y, como corresponde a un período histórico en el cual escritores no nacidos literariamente dentro del género se han acercado fructíferamente a la ciencia ficción publicando en colecciones no especializadas, recoge piezas de Manuel Vilas, Juan Jacinto Muñoz Rengel, Roberto Bartual y Matías Candeira.
De este modo, la antología demuestra una gran diversidad de temas, registros y subgéneros, con lo que el volumen ofrece, por tanto, una lectura variada, sugestiva y enriquecedora, que abre numerosas puertas. Por ejemplo, tenemos la divertida paradoja temporal abordada por Rafael Marín, la sobrecogedora y espléndida distopía de Juan Jacinto Muñoz Rengel, la inteligente ucronía de Roberto Bartual, la irreverente y original pieza de Manuel Rivas, la progresión desde el cyberpunk de Joaquín Revuelta o, así mismo, cómo se retuerce la capacidad de empatía y de la otredad al extremar el extrañamiento en el cuento de León Arsenal. Igualmente, se puede leer el corrosivo y desternillante cuento de Daniel Mares, la tradición de ciencia ficción japonesa presente en el relato de José Ramón Vázquez, la perturbadora pero tierna alegoría de Matías Candeira o la inquietante historia de Rodolfo Martínez, que termina siendo un canto al inconformismo, a la aventura y al riesgo, puesto que fuera de la cultura es donde realmente somos y existimos. También encontramos el sugerente escenario de Juan Antonio Fernández Madrigal, los juegos metaliterarios de Eduardo Vaquerizo y de Juan Miguel Aguilera, la apesumbradora y lograda atmósfera de Santiago Eximeno, en un cuento de delicada construcción, o la reflexión sobre la memoria que lleva a cabo Carlos Pavón empleando unos parámetros que sólo la ficción especulativa hace posible. Entre todos ellos, destaca “Tren”, de Julián Díez, una historia de viajes en el tiempo con distintas tensiones armada a partir del 11-M (esto es, con un motivo particularmente propio), donde se vuelca una profunda crítica sociopolítica de nuestro entorno.
Por tanto, algunos de los cuentos de este libro nos permiten redimensionar la empatía, colocarnos en el lugar del otro; de un otro completamente ajeno a la humanidad. A su vez, la mirada al futuro que ofrecen estos relatos no es nada halagüeña: extinciones, planetas arrasados, sociedades decadentes. La ciencia ficción aparece entonces como hipérbole del poder, de la soberbia de las personas, y nos coloca en una perspectiva única, que objetiviza nuestra sociedad, con una distancia que nos permite observarnos mejor a nosotros mismos. Se revela, entonces, como una herramienta importantísima de indagación, de prospección, más allá de los estereotipos que, mediante la difusión de algunos subgéneros determinados (como la aventura espacial, el space-opera), especialmente a través del medio audiovisual, se han construido en el inconsciente colectivo. Porque, antes que del futuro o del presente, estas historias nos hacen reflexionar sobre el ser humano, sobre su lugar en una Historia que desborda nuestra miopía de siglos, sobre la incidencia de nuestros actos y de nuestro, en numerosas ocasiones, inconsciente devenir.
Con todo ello, Prospectivas constituye una extraordinaria antología, imprescindible para conocer los frutos de la ciencia ficción contemporánea y también la propia fertilidad del relato escrito en castellano en España.