Jitka Hanzlová
por Julia Sáez-Angulo
Sala Castellana de la Fundación Mapfre. Avenida General Perón, 40. Madrid. Hasta el 2 de septiembre
Jitka Hanzlová (Náchod, República Checa, 1958) es una de las fotógrafas más reconocidas del panorama internacional actual. Hanzlová busca la esencia de las personas, de la naturaleza y de los objetos, poniendo de manifiesto las relaciones y tensiones que se establecen entre ellos. La muestra es la mayor retrospectiva internacional de la obra de Hanzlová, y en ella están presentes sus series fotográficas más representativas, así como tres conjuntos inéditos: Horses, Flowers y There is Something I Don´t Know. La Fundación Mapfre ha colaborado estrechamente con la artista en la producción de la última parte de la serie “There is Something I Don´t Know”, cuyas fotografías han sido tomadas en Madrid.
El tiempo suspendido
El hecho de que la fotógrafa checa sufriera el exilio de su país en la ciudad de Essen (Alemania), ocho años antes de que cayera el muro de Berlín y le permitiera volver a su país y ver a los suyos, ha influido notablemente en su trabajo fotográfico: búsqueda de identidad, de hogar y de rencuentro con los suyos.
“La privación del contexto familiar y su inmersión en otro idioma, el alemán, es una experiencia que coincide con el descubrimiento de la fotografía: una lengua franca que no precisa traducción”, explica Isabel Tejeda Martín sobre la fotógrafa checa. La artista trabaja de modo silencioso, poético, sin gritar con la imagen, todo lo contrario, la interioriza, la estudia, le hace susurrar más que decir. Utiliza un formato mediano, cálido que obliga al espectador a entrar en él, como si se asomara a una ventana íntima, ajena.
No se trata de pintar con la fotografía como sucede a veces con el gran formato, sino de sugerir y contar. Sus retratos alojan el tiempo suspendido y toman como referencia el retrato pictórico del Cuatroccento italiano, con sus perfiles hermosos e íntimos de gran belleza.
El trabajo e interés predominante de Jitka Hanzlová “es la comunicación psíquica entre el modelo y la fotógrafa, lo que en última instancia equivale a la búsqueda de la alteridad, de lo desconocido”, dice Tejeda Martín.