“Sint-Jan”: El compromiso gratuito de 51 artistas
por Alberto López Echevarrieta
Catedral de San Bavón, en Gante (Flandes) del 2 de junio al 29 de julio de 2012
Cincuenta y un artistas de todo el mundo participan en el proyecto denominado en flamenco “Sint Jan” y en inglés “Saint John” que se desarrolla en la ciudad de Gante durante los meses de junio y julio. Entre sus especiales características señalamos algunas que se salen de lo normal: Los autores de las obras participan de forma totalmente altruista y la sala de exposiciones es la Catedral de San Bavón, uno de los edificios más emblemáticos de la capital flamenca. Entre ellos están el japonés Masato Kobayashi, la andaluza Cristina Lucas, el madrileño Fernando Sánchez Castillo y el belga Jan Fabre que generalmente suele capitalizar la atención de los espectadores con sus atrevidas esculturas y performances.
La idea
La idea de una exposición tan singular, sobre todo dados los tiempos que corren, se debe a Jan Hoet, uno de los popes europeos del arte, y Hans Martens, pintor y fotógrafo. Ambos pensaron que era posible reunir a un grupo de artistas que plasmara en sus obras su particular visión de los símbolos e iconografía de la tradición cristiana. Tropezaban con la diversidad de creencias de cada uno de ellos, pero acordaron que eso enriquecería la percepción del conjunto. De esta forma, ateos, agnósticos y creyentes, están unidos en una de las muestras colectivas más llamativas de cuantas hasta ahora se han dado.
“El mejor lugar para esta exposición –señala Hoet a ArtesHoy- es la catedral de San Bavón, de Gante. Así que expusimos el proyecto a las autoridades eclesiásticas y recibimos su autorización para utilizar un espacio tan singular como es la cripta del templo. De esta forma se ampliaba la oferta artística actual con la muestra permanente de la obra maestra de la pintura flamenca del siglo XV, “La adoración del Cordero Místico”. Este famoso políptico de los hermanos Hubert y Jan van Eyck, que data de 1432, tiene como tema la glorificación o apoteosis celestial de la salvación del hombre y la santificación por el sacrificio de Cristo. En una capilla especialmente preparada al efecto se puede contemplar su esplendor, la armonía de colores, la grandiosidad de la visión y sobre todo la meticulosidad de unos detalles que cada espectador puede interpretar de forma diferente.
Los artistas
Para que el proyecto “Sint Jan” se materializara se precisaba la colaboración de artistas de todo el mundo a los que debía advertirse que su trabajo iba a ser gratuito. Misión nada fácil en un mundo tan materialista como el actual. Sin embargo, Hoet lo ha conseguido asombrando a todos. Tiene a su favor una brillante etapa como director del Museo Municipal de Arte Contemporáneo (SMAK) de Gante, durante la cual montó dos exposiciones que se convirtieron en los hitos más sobresalientes de esta pinacoteca, “Chambres d’Amis” (1986) y “Over the Edges” (2000). Esta leyenda viva en el mundo del arte actual fue tocando todos los resortes para convencer a sus amigos consiguiendo al fin un resultado altamente positivo. Cincuenta y un artistas han acudido a la cita.
“Entiendo que no es fácil combinar Arte e Iglesia, nos dice, pero ahí estriba principalmente otro de los riesgos del proyecto. He hablado con ellos sobre nuestra idea en el sentido de que la religiosidad sigue influenciada por el arte y que la visión de una pieza en un museo es muy diferente a la que pueda ofrecer en el interior de una iglesia. Yo estoy seguro de que sus obras adquirirán una nueva dimensión a través de una relación de interés ya comprobado no sólo con “La adoración del Cordero Místico”, sino también con obras de Rubens, Rombouts, Heere, etc. que cuelgan en las paredes del templo, de un magnífico púlpito de mármol blanco de Carrara y roble obra de Delvaux, y de curiosidades históricas tales como el Crucifijo y los candelabros del altar mayor que regaló el mismísimo Napoleón a la ciudad de Gante en 1803”.
Hopet hace un repaso a la nómina de artistas implicados. Posiblemente uno de los más conocidos sea Jan Fabre que desató una gran polémica en la LIV Edición de la Bienal de Venecia cuando aportó su particular visión de “La Piedad” de Miguel Ángel. Este dramaturgo belga que lo mismo hace escultura y películas que performances aporta en esta ocasión la obra más pequeña en tamaño de cuantas se presentan. También belga es Michael Borremans que trabaja con pintura, fotografía y cine, siguiendo la inspiración de grandes maestros clásicos como Manet, Degas y Velázquez. Su padrino artístico, Jan van Imschoot, artista repetidas veces premiado, también acude a la cita gantesa.
Anne Wenzel, Ben Benaouisse, Berlinde De Bruyckere, Damien Hirst, David Adamo, David Claerbout… En la lista encontramos los nombres de dos españoles, la jienense Cristina Lucas, siempre en busca de un compromiso social para sus creaciones contemporáneas, y el madrileño Fernando Sánchez Castillo que juega con los simbolismos a la hora de ofrecer atractivas fotografías.
“Entiendo que para algunos artistas esta muestra signifique un auténtico desafío porque han de adaptarse a la arquitectura física y espiritual de la catedral. Posiblemente a algunos espectadores les parezcan modestos trabajos, pero son el resultado del lema propuesto: espiritualidad y religión”.
“Sint Jan” puede parecer una idea loca dentro del mundo del arte, pero también una genialidad. A fin de cuentas, las ideas geniales sorprenden porque no se nos han ocurrido antes.