Nada Surf, el efecto de la proximidad
por Xavier Valiño
A principios del pasado mes de enero una discográfica que sigue creyendo a contracorriente en el potencial de la música grabada, Ernie Records, publicó en toda España el nuevo disco de Nada Surf, The Stars Are Indifferent to Astronomy (Las estrellas son indiferentes a la astronomía), el séptimo álbum de la banda neoyorkina y el primero con material nuevo en cuatro años. Continuando con su apuesta, estuvieron también recientemente de gira por nuestro Estado.
La formación de Nada Surf la siguen componiendo, desde hace casi 20 años, Matthew Caws (voz y guitarra), Ira Elliot (batería) y Daniel Lorca (bajo). Daniel, de familia madrileña pero afincado en Nueva York desde la infancia, sigue utilizando el mismo bajo Fender Precision destrozado que recibió como regalo de sus padres a los 18 años y que ya a finales de los 80 tocaba en grupos españoles de aquel entonces como Ángel y las Güais.
En esta ocasión, como sucediera en If I Had a Hi-Fi y su consiguiente gira, han invitado al guitarrista Doug Gillard (Guided by Voices, Death of Samantha) a unirse al grupo. Chris Shaw (Wilco, Brendan Benson, Elvis Perkins y Super Furry Animals), que ya trabajó con la banda en la mezcla de “Always Love”, ha sido el encargado de la producción y la grabación de este nuevo álbum. A diferencia de otros discos de Nada Surf, The Stars Are Indifferent to Astronomy ha sido grabado con la intención de capturar el sonido del directo de la banda.
“Siempre hemos tocado más rápido y un poco más fuerte en directo”, dice Caws, “pero en el estudio lo hacíamos con más cuidado. Así que para este álbum tomamos la decisión consciente de preservar lo que se siente en el local de ensayo al tocar con esa energía de las canciones nuevas. Simplemente aceptarlo y no preocuparnos por si nos estamos pasando, no pensarlo demasiado”.
Los tempos son altos, pero las canciones están cargadas de melodías contagiosas, cambios asombrosos y los geniales puentes característicos de Nada Surf. “El oído atento percibirá la influencia de muchas bandas, desde el pop británico de los 60 al post-punk o el sonido de los grupos independientes más clásicos, pero aun así hay un inconfundible sonido de Nada Surf: el impulso de la sección rítmica, los acordes introspectivos y el peso emocional único de la voz, a la vez juvenil y llena de alma, una combinación de sabiduría y vulnerabilidad”.
Nada Surf habían grabado todos sus discos excepto el primero fuera de Nueva York, pensando que así evitarían las distracciones. Pero si quieres conservar la energía del local de ensayo, ¿por qué no grabar en el local de ensayo? Así que para The Stars Are Indifferent to Astronomy se instalaron en el lugar donde ensayan, en el loft de Daniel Lorca en Williamsburg, Brooklyn. El lugar se llama “The Sitcom” porque recibe con regularidad la visita de un pintoresco reparto de personajes y alberga fiestas legendarias. Aunque hacerlo así trajo algunos problemas: “No podíamos grabar las voces de noche porque se colaba la música del bar de abajo”, asegura el cantante Matthew Caws.
“Hacer este álbum ha sido un gran placer, es la vez que mejor nos lo hemos pasado con un disco. Durante muchos años escribía sólo si tenía algún problema en mi vida y necesitaba dejarlo atrás, pero esta vez quería superar lo de escribir sólo sobre mí. Esa nueva perspectiva, para mí, ha sido el motor para hacer este disco”.
The Stars Are Indifferent To Astronomy continúa, pues, la idea de la música como una realidad alternativa y las canciones como algo que puedes tener a tu lado como inspiración y apoyo, que es lo que hace de Nada Surf una banda realmente apreciada por sus seguidores.