José María Gómez, «Visión universal de la Hispanidad de la Reina Isabel la Católica”. Conferencia
por Carmen Valero
El profesor José María Gómez Gómez, Gran Maestre del Capítulo de Caballeros y Damas de Isabel la Católica, ha impartido una conferencia titulada «Visión universal de la Hispanidad de la Reina Isabel la Católica” en la Casa de Castilla-La Mancha, dentro del Aula “Abriendo las puertas Hispanoamérica”, dirigida por Isabel Jenny Tello, quien presentó al conferenciante.
Para el profesor Gómez, el concepto de Hispanidad nace fundamentalmente con la Reina Isabel la Católica, por su idea de asimilación de los territorios descubiertos por Colón -las Indias Occidentales- que fueron incorporados a España como una prolongación de la península recién unificada por Isabel I y Fernando V de Castilla, territorios como virreinatos, como provincias y no como colonias. Era la España de las Españas. El primer cometido de la Reina fue la evangelización y por ello se necesitaba la comunicación en la lengua castellana, que se hizo el español, al hablarse en todos los nuevos territorios. Fray Hernando de Talavera encargó a Nebrija una Gramática de la lengua, la primera europea. Los misioneros estudiaron las lenguas vernáculas de los indios e hicieron algunas de sus gramáticas para mejor evangelizarlos.
La Reina se encargó también de enviar animales y plantas como vacas, caballos, vides y las técnicas superiores en agricultura que regían en Europa. Lo mejor fueron las leyes de Indias y el propio Testamento de la Reina, en los que se prohíbe la esclavitud de los aborígenes y requiere buen trato para ellos. Incluso hizo repartir con sus familias a un cargamento de 500 indios que Colón envió como esclavos en un barco a la península.
Con todo ello, se iba fundando la idea de Hispanidad, una obra o legado de España que se prolongó durante más de 300 años. En el siglo XVI se crearon seis universidades en las llamada Indias Occidentales; once, en el XVII, y quince en el XVIII. Cuando llegó la independencia de los territorios americanos, a comienzos del XIX, había 33 universidades fundadas.
La invasión napoleónica a España trastocó la marcha y relación con los territorios americanos, donde se crearon Juntas para no obedecer al invasor francés hasta que llegó el rey Fernando VII, el “Deseado”, que lamentablemente quiso volver a un régimen autoritario, por lo que, al no aceptarlo, las Juntas optaron por la independencia. Los últimos territorios que quedaron junto a España fueron Cuba, Puerto Rico y Filipinas, hasta que la artera intervención de los Estados Unidos en Cavite, acabó con la presencia de España al otro lado de Atlántico. Tras la pérdida de los territorios, comenzó la abulia y desidia de España, hasta que un grupo de intelectuales, dirigidos por Miguel de Unamuno llevó a cabo un movimiento regeneracionista en el 98 y concibió la Hispanidad -palabra indicada por Unamuno– y señaló que la España mayor había pasado a ser minor. Había que buscar de nuevo la unidad para la grandeza. Se enfatizó Castilla y lo castellano, como la región que había de regenerar España. Se acuña definitivamente la palabra Hispanidad, y se establece el Día de la Raza el 12 de octubre, que derivaría a Día de la Hispanidad, algo que se prolongó durante el franquismo, para terminar en el Día Nacional, cuando llegó la democracia.
Hay que recuperar la idea de Hispanidad, concluyó el conferenciante, como corazón y alma de una comunidad que piensa, habla y siente en español, que al decir de Rubén Darío, estaría entre dos polos: el expansionismo norteamericano y el europeo ruso.
Hoy es el indigenismo el que pide cuentas a la presencia de España en los territorios descubiertos desde 1492, y “puede hacerlo», porque afortunadamente quedan indígenas”, señaló el conferenciante, unos indígenas a los que nunca España les obligó a hablar español y fueron, sin embargo, los mandatarios americanos, como Benito Juárez, los que obligaron a ello.
Fotos: Adriana Zapisek